La mayoría de los usuarios de Internet no entienden cómo proteger su privacidad en línea.
El monitoreo y el seguimiento de las actividades en línea llevadas a cabo por terceros es el problema más común relacionado con la privacidad en línea.
Varios países aplican regulaciones de privacidad en línea estrictas, incluida la Unión Europea con las Regulaciones Generales de Privacidad.
Terceros pueden acceder a sus datos en línea a través de sitios web inseguros y spam.
Las compras en línea pueden poner en riesgo su información personal, si la tienda que usa no tiene la protección adecuada.
Los usuarios de Internet pueden usar un navegador diseñado específicamente para una alta privacidad en línea.
Los usuarios también pueden proteger su privacidad mediante el uso de servicios VPN para ocultar su dirección IP.
Los usuarios de Internet pueden ver y controlar su información personal almacenada por Google, Facebook y otros servicios.
Los usuarios pueden controlar lo que comparten en las redes sociales y asegurarse de que la información no se utilice para fines no autorizados.
El aprendizaje automático y el algoritmo utilizado por las empresas de tecnología pueden causar serios problemas de privacidad.