El primer robot realizado fue unir en 1961, y se utilizó para llevar a cabo tareas repetidas en fábricas.
Los robots se pueden programar para llevar a cabo tareas muy complejas y precisas, como la construcción de automóviles o aviones.
Los robots se pueden utilizar para ayudar a los humanos en varios campos, como la médica, la industria, la agricultura, etc.
Los robots pueden comunicarse con humanos a través del lenguaje humano o el lenguaje de la máquina como C ++, Python o Java.
Hay tipos de robots diseñados para ayudar a los humanos en actividades diarias, como robots de limpieza en el hogar o robots de entrega de alimentos.
Los robots se pueden controlar de forma remota, como desde una sala de control segura o a través de Internet.
Los robots se pueden utilizar para explorar en un entorno muy peligroso para los humanos, como bajo el agua o espacio.
Los robots se pueden programar para aprender y desarrollar nuevas habilidades, como reconocer las caras humanas o mejorarse.
Los robots se pueden usar para hacer productos muy precisos y recurrentes, como productos electrónicos o farmacéuticos.
Los robots se pueden usar para reducir los impactos ambientales reemplazando el trabajo peligroso o dañando el medio ambiente con robots más seguros y eficientes.