La violencia doméstica es una forma de violencia cometida por alguien con su pareja en una relación íntima.
Cada año, más de 10 millones de mujeres en todo el mundo experimentan violencia doméstica.
La violencia doméstica no solo ocurre en las mujeres, sino también en niños y hombres.
La violencia doméstica puede ocurrir física, psicológica, sexualmente e incluso la economía.
Muchas víctimas de violencia doméstica les resulta difícil informar el incidente por temor a la venganza de los perpetradores.
La violencia doméstica puede afectar la salud mental y física de las víctimas, y puede causar problemas de salud a largo plazo.
Muchas víctimas de violencia doméstica no tienen suficiente apoyo social o financiero para escapar de la situación.
Más de la mitad de todos los casos de violencia doméstica ocurren en el hogar con niños.
La violencia doméstica puede ocurrir en todos los niveles de la sociedad, independientemente de la religión, la raza o el estatus social.
Muchos países de todo el mundo han tomado medidas para superar la violencia doméstica, como brindar protección legal para las víctimas y proporcionar servicios de apoyo para los necesitados.