El vino espumoso se conoce como el tipo de vino más animado porque tiene pequeñas burbujas que se forman a partir de dióxido de carbono.
El vino espumoso se produjo por primera vez en Champagne, Francia, en el siglo XVII.
El tipo de vino espumoso más famoso es el champán, que solo se puede producir en el área de Champagne, Francia.
El vino espumoso se realiza sometiendo al segundo proceso de fermentación en la botella, de modo que el dióxido de carbono resultante está atrapado en él.
El vino espumoso se puede producir utilizando varios tipos de uvas, incluidos Chardonnay, Pinot Noir y Pinot Meunier.
Antes de abrir una botella de vino espumoso, debe enfriarse primero para que las burbujas estén más y no desaparezcan rápidamente.
El vino espumoso se puede usar como ingrediente básico de bebidas mixtas como mimosa y bellini.
Hay varios tipos de vino espumoso que son más baratos y más fáciles de encontrar, como Prosecco que se originan en Italia.
El vino espumoso que se ha abierto debe emborracharse de inmediato, porque las burbujas desaparecerán rápidamente si se deja abiertos demasiado tiempo.
Hay varias formas que se pueden hacer para abrir una botella de vino brillante de manera segura, como abrir el corchen lentamente y colocar la botella en un cubo de hielo para enfriarla.
